La aventura empezó aquí
La historia de como nació Gin Lemon Weddings, empresa de organización de eventos creativos.
wedding planner, destination wedding, wedding, inspiración para bodas, bodas, organizador bodas, organización de bodas, bodas diferentes, bodas en valencia, bodas en españa
15905
post-template-default,single,single-post,postid-15905,single-format-standard,bridge-core-3.0.1,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.5.3,qode-page-transition-enabled,ajax_updown,page_not_loaded,,qode-theme-ver-28.7,qode-theme-bridge,disabled_footer_top,disabled_footer_bottom,wpb-js-composer js-comp-ver-6.8.0,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-7

La aventura empezó aquí

La aventura empezó aquí

La historia de cómo nació Gin Lemon Weddings

Aquí empieza nuestra historia, si nos habéis contratado o habéis recibido un email con nuestras tarifas, entenderéis el título de este post. En el asunto siempre ponemos «La aventura empieza aquí» y así es. Creedme cuando os digo que casarse hoy en día es una aventura y diseñar una boda desde el principio hasta el final aún más. Pero ¿cómo empiezas a organizar bodas? esto es una pregunta muy recurrente. De hecho, tengo amigos que aún no entienden a qué me dedico.

Foto de Norwud

Pues bien, después de terminar Publicidad y RRPP más Periodismo, decidí embarcarme en el apasionante mundo del emprendimiento y crear mi propio estudio de branding y creatividad. Siempre que me preguntaban sobre mi trabajo me costaba mucho definirlo ya que hacía de todo. Los logotipos trajeron páginas webs, gestión de rrss y al final organización de pequeños eventos corporativos. En ese momento me di cuenta de que me encantaba la organización de eventos porque me permitía ser creativa casi en cada parte del proceso. La verdad es que desde muy pequeña me gustaba organizar » saraos», se me daba bien y disfrutaba mucho aunque nunca le había prestado demasiada atención.

En 2012 se casa mi hermano y organizo una despedida temática versión Bali. Amigos y familiares vestidos con trajes típicos, una masía con plantas tropicales, comida asiática y cada pequeño detalle pensado. A partir de ese momento, sigo organizando pequeños eventos. En 2016 organizo una cena de gala en una carpa y consigo transformarla en un jardín. Un olivo central, mesas de madera rústicas, guirnaldas de luces y música de violines en directo. Y es ese año cuando me doy cuenta de que tengo que hacer algo más para conseguir clientes, pero no es hasta 2018 cuando decido invertir en una plataforma de publicidad.

Podríamos decir que en 2018 es cuando Gin Lemon Weddings empieza a ser lo que hoy conocemos como Gin Lemon Weddings. Los comienzos fueron duros, no sabíamos qué cobrar porque nadie nos lo había enseñado así que cobrábamos muy poco. Hacía muchísimo más de lo que nos correspondía y no teníamos horarios, pero amaba mi trabajo y sentía que estaba ayudando a personas a conseguir la boda de sus sueños de manera creativa.

Foto de Norwud

Recuerdo como transformamos un colegio en un espacio de bodas. Fuimos allí y lo vimos claro, tenía un potencial espectacular aunque nunca lo habían explotado. Transformamos una pinada en la ceremonia, construimos un arco y lo decoramos con una guirnalda de flores, cortamos hiedra para hacer el pasillo. El cóctel lo hicimos en una plaza, puestos de comida y un grupo de música en directo. Después transformamos el campo de fútbol en la zona de banquete.

El mismo año de la boda de esta foto, 2019, afronto el proyecto más difícil que he tenido, organizar mi propia boda. Al estrés de una boda hay que añadirle que un mes antes de casarnos venden el espacio y el nuevo propietario no quiere hacer bodas allí. Así que tengo que buscar plan B y reorganizar toda la boda en menos de un mes y en temporada alta, pero esto es otra historia que contaré en próximas entradas.

Para las que me preguntáis que formación tendríais que hacer, no puedo recomendaros ninguna, sé que hay cursos y másteres que dan formación básica, pero la verdad es que se aprende sobre el terreno. Sobre todo hay que tener la mente abierta y ser muy resolutivo porque puede pasar cualquier cosa y tienes que resolverlo rápido sin bloquearte. Añadiría que hay que escuchar mucho a las parejas y ser una persona creativa y apasionada para hacer que cada boda sea diferente aún incluso siendo en el mismo espacio. Sinceramente para mí, ver a todas esas parejas emocionadas, felices y muy agradecidas es la mayor recompensa.

P.D: Veréis que a veces hablo en plural y es porque aunque esta historia la empecé yo sola, hay muchísimas personas que me han ayudado a lo largo de todos estos años. Sobre todo mis padres, Laura, Marina, Germán y mi medio limón Luis que no se pierde una.

Fotografía de Juan Ortega

No Comments

Comenta